Fuerteventura cuenta con un tesoro gastronómico escondido en el aceite de oliva virgen. El olivo es un cultivo relativamente nuevo en la isla, por lo que no es sencillo hacerse con el producto, pero la contrastada calidad del zumo de aceituna cultivada bajo el sol majorero hace que valga la pena el esfuerzo de buscarlo y probarlo
El sol de Fuerteventura, la calidez y suavidad de su clima, y la riqueza y fertilidad del terreno majorero han dado lugar a una joya gastronómica inesperada, el aceite de oliva. Desde hace muy pocos años, los agricultores de la isla han ido incrementando paulatinamente el cultivo del olivo.
En un principio, muchos lo hicieron simplemente para proteger del viento el resto de sus plantaciones, pues se trata de un árbol muy resistente. Pero una vez se han puesto a recolectar y procesar el fruto de la aceituna, el resultado ha sido un producto de una calidad tan sorprendente como exquisita. El aceite de oliva virgen que se produce en Fuerteventura no alcanza una gran producción, pues no se recolectan más de cien toneladas a lo largo del año, y la producción total no supera los diez mil litros
Precisamente, por este motivo, su escasez, así como por las excelentes propiedades del producto, el aceite de oliva majorero es considerado un majar enormemente apreciado. Los expertos que lo han analizado han constatado que el zumo de la aceituna obtenida en Fuerteventura ofrece unas características organolépticas, físico-químicas y alimenticias excepcionales. Puro oro líquido, aseguran, pues se trata de un aceite impregnado de intensos aromas a fruta fresca, es suave, caracterizado por su color verdoso y sus dulces matices.
El aceite majorero es cien por cien virgen, es decir, que ha sido obtenido mediante procesos que incluyen únicamente el lavado, la decantación, la centrifugación y el filtrado. Por si fuera poco, muchos de los olivicultores de la isla han sido capaces de obtener un producto plenamente ecológico, cultivando y envasando el producto sin ningún tipo de aditivo y de manera totalmente natural, lo que permite conservar todo el sabor, los aromas y las vitaminas del fruto primordial.
Las autoridades locales han impulsado también este cultivo, poniendo a disposición de los oliveros una almazara en la que poder moler la aceituna y obtener su propio aceite, y también en la Granja Agrícola y Experimental de Pozo Negro se reproducen las variedades más apropiadas para la aridez del clima insular, como por ejemplo las aceitunas picual, hojiblanca, arbequina, verdial y manzanilla.
El aceite de oliva es uno de los productos más representativos de la dieta mediterránea, junto al tomate, el plan o el vino, y está considerado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. A la Península Ibérica llegó de la mano de los fenicios hace mil años, y desde entonces los productores hispanos han continuado produciendo y perfeccionado el producto.
Propiedades y platos típicos
El aceite de oliva es un producto reconocido por su elevada proporción de grasas insaturadas (ácidos grasos monoinsaturados y ácido graso oleico), que en contraposición con las saturadas, contribuyen a mantener niveles normales de colesterol sanguíneo. Además, posee un alto contenido de vitamina E, que favorece la protección de las células frente a la oxidación.
El aceite de oliva virgen de Fuerteventura puede dar lugar a gran variedad de exquisitos platos. Pocos placeres pueden superar a degustar un entrante de tomate de la tierra acompañado de queso majorero, tierno o curado, condimentado con un pellizco de orégano y sal, y finalmente regado con un generoso chorro de aceite de oliva virgen.
Igualmente, resulta exquisito en una sencilla ensalada de lechuga, tomate, pepino y cebolla, o puede ser apropiado para la preparación de las carnes de la caza y del campo, como el pollo, el conejo o la perdiz.
Un aceite de calidad extrema como este también puede resultar excelente en una simple tostada de pan artesano, añadiendo también un poco de sal o de azúcar, dependiendo del gusto.
Y también por supuesto, para acompañar pescados blancos y carnosos como la vieja a la espalda, o cualquier pescado al horno.
¿Dónde conseguirla?
Es posible encontrar aceite majorero en los aeropuertos de Fuerteventura, Gran Canaria y Lanzarote. También en las tiendas oficiales de la Artesanía del Cabildo, situadas en la calle Primero de Mayo de Puerto del Rosario, en el casco antiguo de Betancuria y en el Museo del Queso, en Antigua.
Pero sin duda, para disfrutar de una auténtica experiencia local, cultural y tradicional, la mejor opción es visitar los diferentes mercadillos que se organizan a lo largo y ancho de la isla.
En los mercados artesanales, los productores del sector primario ofertan directamente al comprador una amplia gama de productos de la tierra, todos exquisitos y frescos, auténticos y exclusivos. Hablamos de como verduras y frutas ecológicas, pan, una amplia gama de quesos, bizcocho y pasteles artesanales, sal de espuma, derivados de aloe vera, salsas de mojo y mermeladas, y también, por supuesto, el preciado aceite de Fuerteventura.
En la zona norte, los mercados más interesantes son:
El Mercado de las Tradiciones de La Oliva, todos los martes y viernes, de 10:00 a 14:00 horas en la Casa de Los Coroneles. Es un claro exponente de los productos gastronómicos majoreros.
En Lajares también se celebra un interesante Marcado Artesanal, en la plaza del pueblo, todos los sábados de 10:00 a 14:00 horas, más centrado en productos de artesanía.
En zona centro:
Mercado Agrario La Biosfera. Todos los sábados, de 9:00 a 14:00 horas, en la planta alta de la Estación Insular de Guaguas de Puerto del Rosario. Ofrece una variadísima oferta de productos gastronómicos
Mercado Artesanal de Tetir. Se trata de un mercado trimestral, que tiene lugar cada año en el segundo domingo de los meses de marzo, junio, septiembre y diciembre. Este mercadillo tiene un carácter de feria, y supone una muestra no sólo de la gastronomía y la artesanía, sino de todas las tradiciones majoreras.
En la zona sur:
Mercado Agro-Artesanal de La Lajita, que organiza todos los domingos, de 9:00 a 14:00 horas, el parque zoológico Oasis Park Fuerteventura. Además de frutas, verduras, queso y productos panaderos y pasteleros, este mercadillo es interesante por su oferta de flores, plantas y semillas.