Si has tenido la suerte de hacer una excursión a Isla de Lobos desde Corralejo te habrás fijado, al poner pie en tierra, en unos peculiares arbustos de finas ramas verdosas, muy característicos, las aulagas (Launacea arborescens).
Precisamente es ahora (marzo) cuando estas plantas empiezan a florecer ampliándose el periodo hasta junio.
Estos arbustos son característicos no solo de Lobos, sino de Fuerteventura y resto de Islas Canarias en general. En Fuerteventura y Lobos estos arbustos se pueden ver prácticamente en toda la superficie, quizá en las zonas altas sean menos habituales.
Se trata de una planta perenne, muy abundante en los terrenos áridos y secos del piso basal infracanario. Puede llegar a medir hasta 1 metro, con lo que no son muy altos; sus tallos son finos y redondeados, de color verde apagado.
Es tan abundante y representativo en nuestra isla que ya el famosos escritor Unamuno —que pasó su destierro en estas tierras áridas— le dedicó unas palabras a esta planta en “Artículos y discursos sobre Canarias”:
“La aulaga majorera, de Fuerteventura —se llama majoreros a los de Fuerteventura— tiende su triste verdor pardo, su verduras gris, por entre pedregales sedientos. La aulaga no tiene hojas, la aulaga desdeña la hojarasca; la aulaga no es mas que un esqueleto de planta espinosa. Sus desnudos y delgados tallos, armados de espinas, no se adornan más que con unas florecillas amarillas. Y todo ellos se lo come el camello, el compañero del hombre en esta isla, su más fiel servidor (…). Qué lección de estilo y de lo más íntimo del estilo, esta aulaga de Fuerteventura, es la expresión de la isla misma; es la isla misma expresándose, diciéndose; es la palabra suprema de la isla. En la aulaga ha expresando sus entrañas volcánicas, el poso de su corazón de fuego, esta isla entrañable.» Unamuno
Hemos elegido las palabras de este gran escritor porque describen con belleza y acierto este arbusto tan abundante en nuestras islas.
A lo largo de los años y siendo tan abundante esta planta ha tenido diversos usos, entre ellos, las flores amarillas de la aulaga, solitarias y en pequeños racimos, eran utilizadas en infusión para los niños que tenían Ictericia. Como ya mencionaba Unamuno, también era el alimento favorito de camellos y cabras.
Tanto si habitas estas tierras, como si vienes de visita, en los próximos meses disfrutarás de las flores de este arbusto, que és “la expresión de la isla misma”. Si tienes la suerte de acompañarnos en nuestra excursión a Lobos desde Corralejo verás el paraíso en flor, te esperamos.
El equipo de FuerteCharter