Archivo de la etiqueta: Aves Fuerteventura

La hubara canaria habitante de Isla de Lobos, Fuerteventura y Lanzarote

La árida, virgen y salvaje isla de Lobos —que mostramos con pasión a los visitantes que se suman a nuestras excursiones desde Corralejo— es uno de los pocos lugares, junto con Fuerteventura, Lanzarote y La Graciosa, donde vive una de las más singulares aves de la fauna española, la hubara canaria. Su habitat son los áridos paisajes, jables, malpaíses que caracterizan las islas canarias más orientales.

La hubara o avutarda hubara (Chlamydotis undulata) es una especie de ave gruiforme de la familia Otididae plenamente adaptada a vivir en tierras secas y de escasos recursos; es un ave omnívoro, terrestre y muy solitario que se encuentran desde Mauritania hasta Egipto y desde el Sinaí hasta Mongolia, siendo la pequeña población de Canarias la única de Europa. La subespecie que habita nuestras islas es fuerteventurae, que constituye un endemismo canario.

Descripción

De cuello delgado y alargado, de tonos grisáceos y blancos,  presenta una cresta o pequeño moño de plumas blancas y negras que suele ser más llamativo en el macho. Los jóvenes, parecidos a los machos, tienen el plumaje más apagado. En realidad esta ave pretende pasar desapercibida, es miedosa y celosa de su intimidad y busca total tranquilidad para su supervivencia con lo que su plumaje suele mimetizarse con el paisaje salvo en época de cortejo. Con 170 cm de envergadura, es el ave más grande que nidifica en las islas canarias. Su alimentación es muy variada tanto materia animal (escarabajos, saltamontes, hormigas, orugas, caracoles y pequeños lagartos) como materia vegetal (flores, brotes, frutos y semillas).

FuerteCharter Excursiones | Aves Fuerteventura e Isla de Lobos: la avutarda Hubara
© AurelioMartín
www.canariasmedioambiente.com

A pesar de que la hubara canaria es de carácter sedentario puede comportarse como migratoria, realizando desplazamientos en busca de hábitats afines e incluso volando entre islas.

Reproducción, cortejo nupcial y cría

En cuanto al ciclo reproductor, aunque es variable, podemos decir que normalmente la puesta es entre febrero y marzo y viene tras una cortejo nupcial de lo más interesante ya que el macho realiza exhibiciones en solitario, una auténtica danza en la que su plumaje se hace más visible para llamar la atención de las hembras; despliegan sus blancas plumas de la cresta y el cuello, moviéndose en círculos y en línea recta; desde la distancia se ve una bola blanca que da efecto semáforo de lo más llamativa, una espectacular danza de cortejo.
Una vez conquistada la hembra y tras la cópula, el macho se desentiende de la crianza y es la hembra la que se encarga en solitario. Suele poner dos o tres huevos que incuba durante unos 23 días, tras los cuales nacen los polluelos capaces de desplazarse al poquito de nacer y que serán criados por su madre durante unos 35 días, quizá en alguna ocasión el macho puede colaborar aunque no es lo general. Las crías suelen estar con su madre hasta el otoño.
Este ave endémico de las islas, tan especial y del que contaremos con unos 800 ejemplares en el archipiélago, está catalogado como en peligro de extinción amenazada por la pérdida del hábitat, por la falta de tranquilidad consecuencia del desarrollo urbanístico, turístico y, en Fuerteventura en concreto, por el trazado de la nueva autovía que cruza por las zonas tranquilas y poco pobladas que se habían convertido en el hogar de estas peculiares y solitarias aves. Para el mantenimiento y supervivencia de la especie es clave lograr proteger los espacios que habita.

FuerteCharter Excursiones | Aves Fuerteventura e Isla de Lobos: la avutarda Hubara
© canariasmedioambiente.com

 

Amenazas y conservación

Las actuaciones de conservación se iniciaron en 1985 con la redacción de un plan de recuperación, así como con programas de manejo, educación y sensibilización y la puesta en marcha de un plan de cría en cautividad. Desde 1993, SEO/BirdLife realiza proyectos de conservación en Fuerteventura, subvencionados con fondos del programa LIFE de la Unión Europea. En 2005, esta ONG adquirió una finca de 200 hectáreas, El Cercado de El Jarde, destinada a la protección de la especie donde habitarán unos 18 ejemplares junto con varias especies más de la fauna majorera.

Es un ave que podríamos catalogar como difícil de ver a pesar de ser terrestre ya que como comentábamos es muy celosa de su intimidad, pero no por ello perdamos la esperanza ya que es habitual verla en zonas muy tranquilas correteando huidiza entre las aulagas. Si eres un viajero respetuoso y preocupado de respetar el silencio y la tranquilidad de estas zonas áridas que habitan tendrás muchas más probabilidad de disfrutar de ellas. Por nuestra parte, en nuestras excursiones a Isla de Lobos desde Corralejo estamos muy atentos cuando pisamos tierra ya que aunque no es el ave más habitual a veces tenemos la suerte de verlas corretear en ese pequeño paraíso que es Isla de Lobos.

Equipo de FuerteCharter

Fuerteventura paraíso para las aves: el tarro canelo

Como sabéis cada día partimos desde el muelle de Corralejo con nuestra excursión en catamarán a Isla de Lobos, una excursión magnífica en la que no solo disfrutamos de las maravillas del mar sino también de las maravillas del cielo, pues son muchas las aves que nos cruzamos en nuestro camino en esta preciosa isla que es Fuerteventura.

Desde hace unos meses nos sentimos afortunados de ver, cada vez con más facilidad, unas aves que parecen gansos e incluso graznan con un sonido similar a ellos y que solemos ver en pareja. Se trata del tarro canelo o tadorna ferruginea, que es una especie de ave anseriforme de la familia Anatidae, bastante extendida en Asia y el norte de África.

Podemos presumir de que Fuerteventura posee actualmente la mayor población de Tarro Canelo de España. Aunque en el pasado solía invernar de forma regular en la península y en ocasiones nidificar en Andalucía, actualmente nidifica, de forma exclusiva en nuestra isla.

FuerteCharter Excursiones Fuerteventura | Aves: Tarro Canelo
© Ricardo Herranz

Descripción:

Nombre común:  Tarro canelo
Nombre científico: Tadorna ferruginea
Peso: 1.3-1.6 Kg.
Tamaño: 61-67 cm. de longitud
Envergadura: 110-135cm

Como ya comentamos el tarro canelo tiene aspecto de ganso, de cuello y patas largas. Su cabeza es de color crema mientras que la cola es de color negro de alas negras salvo la parte anterior que es blanca por encima y por debajo; su cuerpo es de color canela rojizo. El macho tiene un collar negro estrechito y la hembra se distingue porque su mascara de la cara es más destacada.

Donde vive

En Fuerteventura vive en los humedales y charcas del interior de la isla, siendo estas sus zonas de cría favoritas, de aguas no profundas, donde pueda pastar en los bordes. Es muy pero que muy habitual ver parejas en las charcas de los Molinos, de Catalina García (Tuineje), la Rosa del Taro (Puerto del Rosario)…; estas zonas húmedas se han convertido en guarderías para la cría de pollos después del periodo reproductor iniciado entre enero y febrero.

Alimentación

Comen tallos y brotes de alfalfa, semillas e insectos típicos de tierras áridas, así como gusanos en suelos más húmedos. Suelen comer principalmente al atardecer y el amanecer.

Reproducción

Suelen poner entre 8 y 10 huevos que son incubados por la hembra unos 28 días, mientras el macho defiende y no se aleja demasiado. Depositan un huevo cada día y empiezan a incubarlos una vez acabada la nidada. Cuando nacen son capaces de alimentarse con gran rapidez aún así la pareja les protege y les dedica unos 55 días de cuidados, hasta que pueden valerse por si mismos.
La primera pareja que llega Fuerteventura fue en el año 94 y los expertos creen que lo hizo de forma natural; actualmente se cree que tenemos una población de más de 300 ejemplares.
Aunque es una especie migradora y hubo periodos en los que desaparecía totalmente de la isla, posiblemente porque acudía a humedales del norte de África, actualmente es habitual verlos durante todo el año, seguramente porque esta isla no está muy masificada y cuenta con humedales similares a los del país africano. Seguramente este año es más habitual verlos y la población crece ya que este otoño ha sido rico en aguas.

A pesar de presumir de población no debemos olvidar que el hombre y su forma de vida es una importante amenaza para la especie, debido a la destrucción de su habitat y, concretamente en Fuerteventura, a la extracción del agua de las charcas para riego. También la caza furtiva y el expolio de los nidos son circunstancias que amenazan la especie.

El tarro canelo se incluye en el Libro Rojo de las aves de España como “En peligro crítico” y aparece en la categoría “De interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.

Desde FuerteCharter seguiremos disfrutando de estas parejas que vemos desde el catamarán en nuestra excursión diaria desde Corralejo al salvaje y virgen islote de Lobos

El Equipo de FuerteCharter

Conoce a la Pardela Cenicienta en nuestras excursiones en barco

En esta aventura en la que nos hemos embarcado, de querer acercar al mundo las maravillas de vivir en un paraíso como es Fuerteventura, sentimos la obligación de hablar de todos aquellas especies animales que nos acompañan día a día en nuestras excursiones en barco por esta zona del Atlántico.

En esta ocasión, para inaugurar nuestra sección de aves de Fuerteventura, queremos daros a conocer la pardela cenicienta, que vuela alrededor de nuestro barco, que anida —para reproducirse y criar—, en uno de nuestros destinos favoritos, la Isla de Lobos, al que acudimos a diario en nuestras excursiones en barco.

Las paderlas son aves marinas, de especie pelágica, que tan sólo abandonan el mar abierto para reproducirse. Su medio, por tanto, es el mar y realizan grandes desplazamientos para buscar alimento que recogen de la superficie marina mientras vuelan.

 

excursiones en barco
© Teolucas

La pardela cenicienta, característica de nuestras islas, debe su nombre común al color gris ceniza de su plumaje. Vuela y pesca en grupos, y vuela muy bien con fuertes vientos. Es capaz de atravesar el océano Atlántico y regresar cada año a los mismos lugares de cría.

Son aves de tamaño medio (40-45 cm.), provistas de largas alas y pueden llegar a vivir hasta 30 años de manera natural.

Canarias, zona de reproducción y cría

En Canarias se encuentra la mayor parte de la población de pardela Cenicienta, superior a las 30.000 parejas, seguida de Baleares, Chafarinas y otros islotes mediterráneos.

Solo vienen a tierra, a la costa, a fin de reproducirse, y cuando regresan a su nido, cerca de las zonas de nidificación, emiten unos sonidos nasales y guturales muy característicos. En Fuerteventura, es un clásico, en zonas de costa de poca luz, escuchar el graznido de las pardelas que se acercan a tierra y que reciben respuesta de las que ya están en la misma; anuncian así su llegada de manera escandalosa. Además, cuando se acercan a tierra para criar, esperan la oscuridad de la noche para pasar desapercibidas con facilidad.

Reproducción

Se acercan a nuestras costas en el mes de marzo, en bandos numerosos de entre 300 y 400 ejemplares, momento de intensa actividad social en las colonias de cría. Acuden para ello, principalmente, a islas e islotes, aunque también a acantilados costeros. Utilizan oquedades naturales (cuevas, huras, grietas…) o las excavan, llegando a utilizar como refugio arbustos densos y rocas.
Es el momento de la cópula y es a mediados de mayo cuando ocurre la puesta.

Cría

Ponen un solo huevo cada año que nunca es repuesto si se pierde; solo la mitad de las pardelas que empiezan a criar cada temporada consigue sacar adelante a un pollo hasta su completo desarrollo.

La incubación del huevo es responsabilidad tanto de la hembra como del macho, solo uno de ellos abandona el nido para traer alimento a la pareja, que puede permanecer entre 3 y 9 días sin salir del nido protegiendo al huevo.

La sincronía entre la pareja debe ser perfecta y debe mantenerse durante todo el período reproductor.

excursiones en barco pardela cenicienta
www.amigosdelaspardelas.com

A finales de julio se produce la eclosión del huevo. El pollo, de color gris ceniza, nunca estará solo en su hura o nido, uno de los padres estará siempre a su lado mientras el otro sale en busca de alimento para la familia. Los adultos ceban al pollo con bogas, calamares, caballas, capturadas en alta mar que llevan al nido en el buche parcialmente digerido.

Después de unos 50 días alimentados por sus progenitores es el momento de que los polluelos comiencen a volar y tratar de procurarse su propio alimento en la superficie del inmenso océano. Abandonan la costa de forma instintiva en mitad de la oscuridad de la noche para dirigirse al mar, aunque no todos lo logran ya que  muchos resultarán desorientados por la contaminación lumínica.

Desde hace unos años, los pueblos costeros de Fuerteventura, en época de abandono del nido de los pollos de pardela, apagan sus luces para contribuir a que estos polluelos que tanto han protegido sus progenitores alcancen alta mar.

En diciembre acaba la temporada reproductora y comienzan a migrar, y no será hasta febrero del siguiente año que vuelvan a sus nidos a repetir la reproducción. Los jóvenes no volverán a pisar tierra en sus lugares de nacimiento hasta alcanzar la madurez sexual, después de entre 2 y 9 años.

Las aves que crían en islas atlánticas se dispersan por las costas de África occidental hasta el África del Sur.

Si vienes a Fuerteventura, o si ya eres uno de los residentes de este rincón de la macaronesia, no olvides que debes escuchar el canto de la pardela. En nuestras excursiones en barco puedes encontrarla  cuando navegues hacia la Isla de Lobos, es uno de esos espectáculos que nos regala la naturaleza.

Equipo de FuerteCharter